La Hospitalidad


3Juan 1:5-8 “Amado, fielmente te conduces cuando prestas algún servicio a los hermanos, especialmente a los desconocidos, 6 los cuales han dado ante la iglesia testimonio de tu amor; y harás bien en encaminarlos como es digno de su servicio a Dios, para que continúen su viaje. 7 Porque ellos salieron por amor del nombre de El, sin aceptar nada de los gentiles. 8 Nosotros, pues, debemos acoger a tales personas, para que cooperemos con la verdad.”

Esta mañana vamos a reflexionar con el significado de la palabra “hospitalidad”, y la enseñanza que vamos a encontrar en la biblia sobre este tema.

Significado de Hospitalidad: Atender con amabilidad y generosidad a los invitados o a los extraños.

Esta tercera carta de Juan, muchas veces solo hemos llegado a ella, cuando el tema se refiere a prosperidad, o a salud.

Este verso que nos referimos es el verso 2, que dice:

3Juan 1:2 “Amado, yo deseo que tú seas prosperado en todas las cosas, y que tengas salud, así como prospera tu alma.”

Esta es una gran promesa, en donde vemos que Dios, nos dice que así que como nuestra alma está prosperando en el conocimiento de la palabra de Dios, en el caminar con Jesús, en andar en santidad apartado de todo lo malo, de no hacer mas lo malo, de hacer lo bueno.

Pues esta palabra nos dice que ya que andamos prosperando en nuestra alma, que también él desea que seamos prosperados en “todas las cosas” y que tengamos salud.

Aquí vemos el “deseo” que Juan tiene, hacia Gayo, quien ya es un anciano (Verso 1).

Vamos a notar que entre Gayo y Juan, se muestra un gran afecto, ya que esto lo menciona Juan en los versos (1,2,5 y 11).

Verso 1:1 lo llama “el amado, a quien amo en la verdad”, o al que amo realmente.
Verso 2,5,11 lo llama “Amado”, cuando se dirige a Gayo en forma directa.

Vamos a revisar quien era Gayo en la Biblia.

Gayo sale mencionado en otros pasajes en la Biblia, como vamos a ver en la carta de Pablo a los Romanos.

Gayo fue bautizado por Pablo:
Cuando se dio una división en la iglesia de Corintios, Pablo llegó poniendo el orden en la iglesia, y desde ese momento vemos que ya conocía a Gayo.

1Corintios 1:14 “Doy gracias a Dios de que a ninguno de vosotros he bautizado, sino a Crispo y a Gayo,”

Cuando hubo un gran alboroto en Éfeso
En Éfeso adoraban a la diosa Diana, y cuando Pablo llegó con otros discípulos, los efesios tuvieron temor de que Diana fuera destruida y atacaron a Pablo y vamos a ver que Gayo también andaba ya con Pablo.

Hechos 19:29 “Y la ciudad se llenó de confusión, y a una se lanzaron al teatro, arrebatando a Gayo y a Aristarco, macedonios, compañeros de Pablo.”

Cuando Pablo viajó a Macedonia y Grecia
Cuando pasó el escándalo en Efeso, vamos a ver que Gayo acompaño a Pablo a Macedonia y Grecia.

Hechos 20:4 “Y le acompañaron hasta Asia, Sópater de Berea, Aristarco y Segundo de Tesalónica, Gayo de Derbe, y Timoteo; y de Asia, Tíquico y Trófimo.”

En la carta de Pablo a los Romanos
Romanos 16:23 “Os saluda Gayo, hospedador mío y de toda la iglesia. Os saluda Erasto, tesorero de la ciudad, y el hermano Cuarto.”.

En donde vemos que además de la amistad de Gayo, que refleja en la 3ra carta de Juan, de Gayo como discípulo, acompañando a Pablo en sus viajes a Efeso, a Macedenia y Grecia , se nota que Gayo tiene la hospitalidad como una de sus cualidades, que vemos que el hospedó no solo a Pablo, sino que a toda la iglesia.

Gayo consideraba a todos los miembros de la iglesia como sus amigos o aún más como su familia.

Y este mensaje debe ser igual para todos nosotros, que todos nos consideremos así como Gayo con Pablo, Juan y toda la iglesia, como amigos como una gran familia.

La hospitalidad la debemos de tener para toda persona que venga. Dice la biblia que cuando recibimos a alguien con solo darle un vaso de agua en el nombre de Jesús vamos a tener bendiciones.

Marcos 9:41 “Y cualquiera que os diere un vaso de agua en mi nombre, porque sois de Cristo, de cierto os digo que no perderá su recompensa.”



Cuando vamos a visitar a una parte de la familia que tenemos mi esposa y yo, en Nagarote, a toda casa que llegamos,, ya sean sus familiares o los míos, se nota que la gente nos recibe con una gaseosa, un fresco, sorbete, un pan, que hasta da peno no aceptarlo o decirle que ya nos dieron en otro lado, porque así es la gente sencilla que te recibe como familia, como amigos.

Así igual debemos ser nosotros.

No debemos de ser egoístas, como por ejemplo que solo hay una gaseosa (tiste) para el almuerzo o para la cena y llegan amigos o familia, o hermanos de la congregación. Debemos de darles la gaseosa, (tiste) atenderlos, ser hospitalarios con ellos.

Dios mira nuestro corazón, y de nada vale que escondamos la botella de coca, o el tiste, y aunque le demos agua helada al que nos visita. Y aunque oremos dando gracias cuando vayamos a almorzar y dando gracias además por el tiste que vamos a tomar. No nos sirve de nada porque nos portamos egoístas con la visita que teníamos.

Tampoco de nada vale que yo diga a mi hijo dale un vaso de fresco a la señora que está pidiendo comida en la puerta y cuando vayamos a cenar le diga a la Martita, mi esposa, que el vaso que le dimos a la señora era el vaso de ella y no el mío.

Creen que nuestro Señor Jesús va a ver que hice un buen gesto al darle el vaso de tiste a la señora que pasó pidiendo comida?

Es un buen gesto. No se puede negar al momento de dárselo a la señora.

Pero como no lo hice de corazón, desprendiéndome de lo que era mío, más bien Dios va a ver mi egoísmo cuando le dije a mi esposa que no tiene fresco sino agua.

Sigamos leyendo la 3ra carta de Juan, para conocer el mensaje de esta carta.

3Juan 1:9-10 “Yo he escrito a la iglesia; pero Diótrefes, al cual le gusta tener el primer lugar entre ellos, no nos recibe. 10 Por esta causa, si yo fuere, recordaré las obras que hace parloteando con palabras malignas contra nosotros; y no contento con estas cosas, no recibe a los hermanos, y a los que quieren recibirlos se lo prohíbe, y los expulsa de la iglesia.”

Aquí vemos en esta lectura, que Diótrefes, es lo contrario de Gayo en lo referente a la hospitalidad, más bien dice la palabra: que “no nos recibe”.

Incluso además de no recibir bien a los hermanos, no deja que otros los reciban en su lugar, y además los expulsa de la iglesia.

Como le diríamos a una persona parecida a Diótrefes en León?

Que es un gran fijado. Egoísta. Amargado. Antisocial.

Vamos a ver unos ejemplos, que esperemos no vernos reflejados nosotros.

Por Ejemplo, cuando llegás a la casa de alguien a visitarlo y no has hablado nada y te dicen:

-Casi ni me encontrás porque estaba saliendo. Que se te ofrece?
-Fíjate que ando con un gran sueño. Pero te puedo atender rapidito, que pasó?
-Estoy apurado(a) cocinando o estudiando, casi no tengo tiempo, que es lo me decías?

Dios mira con agrado la hospitalidad
Hebreos 13:1-2 “Permanezca el amor fraternal. 2 No os olvidéis de la hospitalidad, porque por ella algunos, sin saberlo, hospedaron ángeles.”

Así igual pasó cuando Abraham, le apareció Jehová y más tarde el miró a tres hombres.

Gén 18:1-8 “Después le apareció Jehová en el encinar de Mamre, estando él sentado a la puerta de su tienda en el calor del día. 2 Y alzó sus ojos y miró, y he aquí tres varones que estaban junto a él; y cuando los vio, salió corriendo de la puerta de su tienda a recibirlos, y se postró en tierra, 3 y dijo: Señor, si ahora he hallado gracia en tus ojos, te ruego que no pases de tu siervo. 4 Que se traiga ahora un poco de agua, y lavad vuestros pies; y recostaos debajo de un árbol, 5 y traeré un bocado de pan, y sustentad vuestro corazón, y después pasaréis; pues por eso habéis pasado cerca de vuestro siervo. Y ellos dijeron: Haz así como has dicho. 6 Entonces Abraham fue de prisa a la tienda a Sara, y le dijo: Toma pronto tres medidas de flor de harina, y amasa y haz panes cocidos debajo del rescoldo. 7 Y corrió Abraham a las vacas, y tomó un becerro tierno y bueno, y lo dio al criado, y éste se dio prisa a prepararlo. 8 Tomó también mantequilla y leche, y el becerro que había preparado, y lo puso delante de ellos; y él se estuvo con ellos debajo del árbol, y comieron.”

Vemos la hospitalidad de Abraham, que le ofreció varias cosas:

Agua para limpiarse los pies (venían caminando)
Descanso en la sombra (venían con calor o asoleados)
Los hace pasar a su casa (hospitalidad)
Amasó harina y les hizo pan
Tomó un becerro tierno y bueno
Mantequilla y leche

Por esos dice la palabra de Dios, que cuando seamos hospitalarios con alguien, podemos estar hospedando algunos ángeles, o en otras palabras a alguien que nos puede dar palabras de aliento, de profecía, o nos puede dar palabras de exhortación o de consuelo, que podamos estar necesitando en ese momento.

Como mencionábamos en el ejemplo de que yo le daba el fresco de mi esposa a la señora que pasó pidiendo comida en la puerta,

Abrahán no le dio a esos hombres la leche o el pan de Sara, ni tampoco le dio el pan de ayer que posiblemente tenía todo duro, ni tampoco agarró el becerro renco o enfermo (que nadie se iba a dar cuenta), ni les dijo en la puerta que estaba ocupado que estaba por salir, etc.

No.

Abraham dejó todo lo que estaba haciendo y su principal esmero fue atender a los visitantes que estaban en su casa.

Cuando sabemos que alguien conocido necesita hospedaje o no tiene donde quedarse, o no tiene donde comer, o si en nuestra casa no tenemos espacio para que alguien duerma, pero podemos contribuir para ayudar a pagar un hotel a alguien que nos visita. Así estamos siendo hospitalarios con esa persona.

Vamos a ver unas personas que en la biblia nos indica que están esperando porque seamos hospitalarias con ellas.

Mateo 25:35 “Porque tuve hambre, y me disteis de comer; tuve sed, y me disteis de beber; fui forastero, y me recogisteis; 36 estuve desnudo, y me cubristeis; enfermo, y me visitasteis; en la cárcel, y vinisteis a mí. 37 Entonces los justos le responderán diciendo: Señor, ¿cuándo te vimos hambriento, y te sustentamos, o sediento, y te dimos de beber? 38 ¿Y cuándo te vimos forastero, y te recogimos, o desnudo, y te cubrimos? 39 ¿O cuándo te vimos enfermo, o en la cárcel, y vinimos a ti? 40 Y respondiendo el Rey, les dirá: De cierto os digo que en cuanto lo hicisteis a uno de estos mis hermanos más pequeños, a mí lo hicisteis.”

Así como vemos en este pasaje que nuestro Señor Jesús nos habla de varias personas que están pasando dificultades como son:

Hambrientos
Sedientos
Extranjeros
Desnudos
Enfermos
Presos

Aquí vemos que todas estas personas están pasando por dificultades de diferentes tipos, algunas de ellas pueden ser o no ser creyentes, la biblia no dice eso.

O sea que no dice solo visiten enfermos creyentes, o presos creyentes,
Hambrientos creyentes, mendigos creyentes, extranjeros creyentes, etc.

No.

Si volvemos al libro de Hebreos 13, vemos que hay un mensaje, que nos dice que nos acordemos de los presos, como si fuéramos nosotros mismos los presos.

Hebreos 13:3 “Acordaos de los presos, como si estuvierais presos juntamente con ellos; y de los maltratados, como que también vosotros mismos estáis en el cuerpo.”

En otras palabras nos dice que seamos hospitalarios con ellos como si se tratara de nosotros mismos.

Es obvio que tomados de la mano de Jesús no vamos a pasar por todas esas dificultades. Posiblemente pasemos pruebas de no deudas, de enfermedades, de desempleo, pero Dios nos va a ayudar de las formas que menos esperamos, aunque algunas veces digamos que es la suerte, que es la casualidad, que como se le ocurrió a alguien a ayudarnos, etc.

Pero es Dios que está enviando su bendición de la forma menos esperado o comprensible para nosotros.

Cuando la palabra nos dice que lo hagamos como si fuera a nosotros mismos, podemos imaginarnos estar en los zapatos de esas personas que tienen grandes necesidades, como nos sentiríamos nosotros si vemos y recibimos de alguien que nos ayude la necesidad porque estamos pasando, o si enfermos o presos recibimos una visita, o si estamos pasando por hambre y alguien nos regala algo para comer.

De igual forma Dios quiere que así seamos hospitalarios o que seamos generosos con los más necesitados.

Vamos a volver al 3ra carta de Juan, verso 11 y 12

3Jn 1:11-12 “Amado, no imites lo malo, sino lo bueno. El que hace lo bueno es de Dios; pero el que hace lo malo, no ha visto a Dios. 12 Todos dan testimonio de Demetrio, y aun la verdad misma; y también nosotros damos testimonio, y vosotros sabéis que nuestro testimonio es verdadero.”

Aquí notamos que Juan está diciendo a Gayo, que no haga las cosas que hacen los malos, que solo haga las cosas buenas.

Esta palabra nos dice a nosotros que el que hace cosas malas no es de Dios, no conoce a Dios, que solo debemos de hacer las cosas buenas.

En esta lectura Juan también da testimonio de Demetrio, indicando que debemos de cuidar nuestro testimonio, que debemos de hacer las cosas buenas y evitar hacer las cosas malas porque estas destruyen nuestro testimonio.

Palabras de despedida de la 2ra carta de Juan
3Jn 1:13-15 “Yo tenía muchas cosas que escribirte, pero no quiero escribírtelas con tinta y pluma, 14 porque espero verte en breve, y hablaremos cara a cara. 15 La paz sea contigo. Los amigos te saludan. Saluda tú a los amigos, a cada uno en particular.”

En esta lectura vemos que los creyentes que están con Juan, incluido él, les dicen a Gayo que los amigos te mandan saludes.

De igual forma la carta les manda un saludos por medio de Gayo a los otros “amigos” de la iglesia, y hace un énfasis de enviarles saludos uno a uno. Esto da a entrever que Juan conocía a cada uno por su nombre, que aunque no los menciona detalladamente en la carta, eso hace suponer.

Vemos que todos se trataban como amigos, no dice la carta saluda al hermano Carlos, o a la hermana Luisa, sino que dice amigos.

Esto es una mensaje para nosotros que así debemos de tratarnos unos a otros como amigos.

Incluso Jesús antes de morir por nuestros pecados en la cruz, trató de esta misma forma a los discípulos.

Juan 15:14-15 “Vosotros sois mis amigos, si hacéis lo que yo os mando. 15 Ya no os llamaré siervos, porque el siervo no sabe lo que hace su señor; pero os he llamado amigos, porque todas las cosas que oí de mi Padre, os las he dado a conocer.”

Hay una alabanza que cantamos que dice Jesús mi fiel amigo.

Así como Jesús es un amigo fiel, así de igual forma debemos ser amigos entre nosotros mismos, ayudarnos mutuamente.

Gálatas 6:10 “Así que, según tengamos oportunidad, hagamos bien a todos, y mayormente a los de la familia de la fe.”

Los amigos se conocen, se ayudan en momentos de pruebas, sólo los verdaderos amigos están cuando los necesitamos. Están prontos para un consejo, confiamos en ellos nuestros problemas, nuestros triunfos, nuestras dificultades.

Eso es uno de los principios de la hospitalidad, que todos en la iglesia seamos amigos

Que Dios los bendiga y los guarde.