El poder de la promesa

Lectura Inicial
Genesis 28:20 E hizo Jacob voto, diciendo: Si fuere Dios conmigo, y me guardare en este viaje en que voy, y me diere pan para comer y vestido para vestir,
21 y si volviere en paz a casa de mi padre, Jehová será mi Dios.
22 Y esta piedra que he puesto por señal, será casa de Dios; y de todo lo que me dieres, el diezmo apartaré para ti.

Voto: Del hebreo nadár (naw-dar), que significa prometer dar o hacer algo a Dios

En esta lectura vemos a Jacob, que pide la protección a Dios en el viaje que va a emprender, el sustento y el regreso a su casa en paz, si todo esto ocurre el prometo hacerle en ese lugar la casa de Dios, y darle el diezmo de todo lo que Dios le diere.

Esto suena como que está al revés o al contrario, suena más lógico primero dar el diezmo y luego esperar que Dios nos dé la provisión y la protección.

En el plano terrenal muchas veces nosotros hacemos promesas, algunas a nuestras esposas, otras a nuestros padres, etc, pero estas promesas pocas veces las cumplimos. Porque no conocemos el poder de la promesa, porque no conocimos la palabra.

Hay promesas que nos hacemos a nosotros mismos y aun no nos cumplimos a mismos. Me acuerdo en la vida pasada cuando yo amanecía mal por una noche de parranda, me decía NO vuelvo a beber, eso le decía a mi esposa, No vuelvo a fumar, etc y nunca tenemos el coraje de cumplirlo.

Otras veces en la juventud prometemos hacer una responsabilidad dada y no la cumplimos, se nos va el tiempo, el televisor, el nintendo, el celular, el colegio, la universidad, el cyber, un trabajo en grupo, en fin lo que prometimos no cumplimos.

Otro ejemplo, los estudiantes, Si paso el grado, prometo hacer tal y tal cosa…., portarme mejor, etc.

Igual nos pasa con Dios, recuerdo cuando mi hija sufrió de una enfermedad cuando tenía un año, yo prometí a Dios, cambiar de vida, dejar muchos vicios que tenía.

Pero que va, solo fue cosa de días, creo yo, cuando volví nuevamente a las mismas andadas.

Pero Dios recuerda las promesas que le hacemos y nos manda a que la cumplamos, pero no le oímos no sabemos que es una promesa, por eso luego nos vemos en aprietos.
Dios nos manda un aviso, otro, y otro y cuando no le oímos nos manda la corrección, es cuando pasamos dificultades creemos que no nos oye y fuimos nosotros los que rompimos la promesa hecha.

Una promesa hecha a Dios es un asunto muy importante, es un tema bien serio y vital.

Algunas veces puede ser de vida o muerte.

Este tipo de promesa es un tema que la Biblia lo enfoca con una singular importancia.
El cumplir a Dios una promesa, trae recompensa, lo vamos a ver en algunos pasajes en la Biblia.

En esta lectura da la impresión de que Jacob esta condicionando a Dios, pero mas bien Jacob comprendió la promesa hecha por Dios a su abuelo Abraham, y a su padre Isaac.

Vamos un poco atrás en
Genesis 28:12 Y soñó: y he aquí una escalera que estaba apoyada en tierra, y su extremo tocaba en el cielo; y he aquí ángeles de Dios que subían y descendían por ella.
13 Y he aquí, Jehová estaba en lo alto de ella, el cual dijo: Yo soy Jehová, el Dios de Abraham tu padre, y el Dios de Isaac; la tierra en que estás acostado te la daré a ti y a tu descendencia.

14 Será tu descendencia como el polvo de la tierra, y te extenderás al occidente, al oriente, al norte y al sur; y todas las familias de la tierra serán benditas en ti y en tu simiente.

15 He aquí, yo estoy contigo, y te guardaré por dondequiera que fueres, y volveré a traerte a esta tierra; porque no te dejaré hasta que haya hecho lo que te he dicho.

La vida de Jacob en ese momento no era nada fácil.

No tenía casa, iba para casa de su tío Laban hermano de su madre (Rebeca), su vida estaba en peligro, su hermano Esaú trató de matarlo. Génesis 27:22, porque le robó la bendición de su padre. Incluso salió sin nada. Genesis 28:11, puso piedras de cabecera, no andaba bolsa, mochila, nada.

Pero el se tomó de la promesa hecha a su abuelo, cuando se miró en ese problema.

Igual nos ocurre a nosotros, no hacemos promesas hasta que estamos en problemas.

Caemos en problemas por no mantener las promesas hechas.

Jacob pasó 21 años sirviendo a Labán, cuenta la biblia que el suegro lo engañó al casarlos con Lea creyendo que era Raquel, trabajó 7 años por Raquel, y 7 por Lea, en los últimos 7 años Dios lo prosperó abundantemente.

Genesis 30:43 Y se enriqueció el varón muchísimo, y tuvo muchas ovejas, y siervas y siervos, y camellos y asnos.

Ahora vamos a ver en la Biblia que cuando prometemos algo a Dios, el nos va a reclamar la promesa hecha.

Vamos a Genesis 31:11 Y me dijo el ángel de Dios en sueños: Jacob. Y yo dije: Heme aquí.

12 Y él dijo: Alza ahora tus ojos, y verás que todos los machos que cubren a las hembras son listados, pintados y abigarrados; porque yo he visto todo lo que Labán te ha hecho.
13 Yo soy el Dios de Bet-el, donde tú ungiste la piedra, y donde me hiciste un voto. Levántate ahora y sal de esta tierra, y vuélvete a la tierra de tu nacimiento.

Aquí vemos que Jacob se había olvidado de la promesa hecha a Dios, pero a Dios no se le olvida nunca una promesa.

En la biblia vamos a leer otras promesas hechas

Jueces 11:30 Y Jefté hizo voto a Jehová, diciendo: Si entregares a los amonitas en mis manos,
31 cualquiera que saliere de las puertas de mi casa a recibirme, cuando regrese victorioso de los amonitas, será de Jehová, y lo ofreceré en holocausto.

En esta lectura Jefté menciona dos cosas, a su familia o sacrificar una animal. A su familia es ponerlo al servicio de Dios.

Dios también ayudó a Jefté con esta promesa, al darle la victoria sobre los amonitas.

Cuenta la biblia que Jefté al regresar a su caa,su única hija salió a recibirlo y el se entristeció.

Jueces 11:34
Entonces volvió Jefté a Mizpa, a su casa; y he aquí su hija que salía a recibirle con panderos y danzas, y ella era sola, su hija única; no tenía fuera de ella hijo ni hija.
35 Y cuando él la vio, rompió sus vestidos, diciendo: ¡Ay, hija mía! en verdad me has abatido, y tú misma has venido a ser causa de mi dolor; porque le he dado palabra a Jehová, y no podré retractarme.

36 Ella entonces le respondió: Padre mío, si le has dado palabra a Jehová, haz de mí conforme a lo que prometiste, ya que Jehová ha hecho venganza en tus enemigos los hijos de Amón.

Jefté no hizo votos directamente por su hija, el dijo quien me salga al encuentro.

Dios lo probó si cumplía su promesa.

Aquí vemos que a pesar del gran amor que le tenía a su hija, la biblia menciona que ella quedó al servicio de Dios.

Vamos ahora a
1ra Samuel 1:9 Y se levantó Ana después que hubo comido y bebido en Silo; y mientras el sacerdote Elí estaba sentado en una silla junto a un pilar del templo de Jehová,
10 ella con amargura de alma oró a Jehová, y lloró abundantemente.
11 E hizo voto, diciendo: Jehová de los ejércitos, si te dignares mirar a la aflicción de tu sierva, y te acordares de mí, y no te olvidares de tu sierva, sino que dieres a tu sierva un hijo varón, yo lo dedicaré a Jehová todos los días de su vida, y no pasará navaja sobre su cabeza.

Ana era una mujer que no podía tener hijos y le pide a Dios que le de un hijo varón y promete dedicárselo todos los días de su vida.

Dios escucha la promesa de Ana y la cumple.

Luego vamos a ver en la Biblia que Ana cumple la promesa

Vamos a 1ra Samuel 1:24 Después que lo hubo destetado, lo llevó consigo, con tres becerros, un efa de harina, y una vasija de vino, y lo trajo a la casa de Jehová en Silo; y el niño era pequeño.
25 Y matando el becerro, trajeron el niño a Elí.
26 Y ella dijo: ¡Oh, señor mío! Vive tu alma, señor mío, yo soy aquella mujer que estuvo aquí junto a ti orando a Jehová.
27 Por este niño oraba, y Jehová me dio lo que le pedí.
28 Yo, pues, lo dedico también a Jehová; todos los días que viva, será de Jehová. Y adoró allí a Jehová.

Alguien sabe cómo se llamó este niño? Samuel

Otro ejemplo de voto lo hizo el rey David, que lo vamos a ver en

Salmos 56:12
Sobre mí, oh Dios, están tus votos; Te tributaré alabanzas.
13 Porque has librado mi alma de la muerte,
Y mis pies de caída, Para que ande delante de Dios
En la luz de los que viven.

Aquí David le promete alabanzas a Dios por haberlo librado de la muerte.

Es en los salmos donde vamos a ver en muchos de ellos las alabanzas del rey David, por haberlo sacado Dios de muchas dificultades, hasta de muerte.

Otro caso que vamos a ver lo encontramos en

Hechos 18:18 Mas Pablo, habiéndose detenido aún muchos días allí, después se despidió de los hermanos y navegó a Siria, y con él Priscila y Aquila, habiéndose rapado la cabeza en Cencrea, porque tenía hecho voto.

Aquí voto es por una tradición de raparse la cabeza que tenían los judíos a los nazareos.

Nasareo: apartado, consagrado a Dios

Núm 6:18 Entonces el nazareo raerá a la puerta del tabernáculo de reunión su cabeza consagrada, y tomará los cabellos de su cabeza consagrada y los pondrá sobre el fuego que está debajo de la ofrenda de paz.

La tradición judía al dedicarse a Dios era no cortarse el pelo, no tomar vino, al entregar el voto era cuando se cortaban el pelo.

Que ocurre cuando no se cumple un voto/promesa?

Ya vimos que hacer un voto es algo muy serio. Y el no cumplirlo tiene sus consecuencias.

En la biblia vamos a revisar un caso de no cumplir el voto.

Vamos a 2da Samuel 15:7-8 Al cabo de cuatro años, aconteció que Absalón dijo al rey: Yo te ruego me permitas que vaya a Hebrón, a pagar mi voto que he prometido a Jehová.
8 Porque tu siervo hizo voto cuando estaba en Gesur en Siria, diciendo: Si Jehová me hiciere volver a Jerusalén, yo serviré a Jehová.

Pero Absalom no cumplió su voto, y Dios terminó quitándole la vida por haber incumplido.

Vamos a 2da Samuel 18:9 Y se encontró Absalón con los siervos de David; e iba Absalón sobre un mulo, y el mulo entró por debajo de las ramas espesas de una gran encina, y se le enredó la cabeza en la encina, y Absalón quedó suspendido entre el cielo y la tierra; y el mulo en que iba pasó delante.
10 Viéndolo uno, avisó a Joab, diciendo: He aquí que he visto a Absalón colgado de una encina.
11 Y Joab respondió al hombre que le daba la nueva: Y viéndolo tú, ¿por qué no le mataste luego allí echándole a tierra? Me hubiera placido darte diez siclos de plata, y un talabarte.
12 El hombre dijo a Joab: Aunque me pesaras mil siclos de plata, no extendería yo mi mano contra el hijo del rey; porque nosotros oímos cuando el rey te mandó a ti y a Abisai y a Itai, diciendo: Mirad que ninguno toque al joven Absalón.

13 Por otra parte, habría yo hecho traición contra mi vida, pues que al rey nada se le esconde, y tú mismo estarías en contra.
14 Y respondió Joab: No malgastaré mi tiempo contigo. Y tomando tres dardos en su mano, los clavó en el corazón de Absalón, quien estaba aún vivo en medio de la encina.
15 Y diez jóvenes escuderos de Joab rodearon e hirieron a Absalón, y acabaron de matarle.

Dios nunca olvida una promesa.

Algunas veces cuando estamos pasando apuros hacemos una promesa y no la cumplimos, algunas veces por problemas de trabajo, enfermedad, problemas familiares.

El Rey David sabía la importancia de cumplir un voto.

Salmos 66:13 Entraré en tu casa con holocaustos; Te pagaré mis votos,
14 Que pronunciaron mis labios Y habló mi boca, cuando estaba angustiado.

Que dice la Biblia, si no cumplimos una promesa?

Vamos a Eclesiastes 5:4 Cuando a Dios haces promesa, no tardes en cumplirla; porque él no se complace en los insensatos. Cumple lo que prometes.
5 Mejor es que no prometas, y no que prometas y no cumplas.
6 No dejes que tu boca te haga pecar, ni digas delante del ángel, que fue ignorancia. ¿Por qué harás que Dios se enoje a causa de tu voz, y que destruya la obra de tus manos?

Que debemos de hacer?

Entregarle a Dios todos nuestros problemas, hacer un voto o una promesa con El, una cambio de vida, cambio de actitud.

Dedicarle nuestras vidas, nuestras familias a servirle, apartarnos de no hacer lo malo, de hacer lo bueno.

Dedicar tiempo para su obra, conocerlo mas, estudiar su palabra, llevar el evangelio a otros, visitar enfermos, presos, llevar consuelo a otros.

Que Dios te bendiga y te guarde,

Amén