Qué significa Jesús es el Señor?

Lectura Inicial:
Rom 10:9-10 que si confesares con tu boca que Jesús es el Señor, y creyeres en tu corazón que Dios le levantó de los muertos, serás salvo.
10 Porque con el corazón se cree para justicia, pero con la boca se confiesa para salvación.

El día de hoy vamos a tener nuestra reflexión sobre este título dado a Jesús, y el porqué debemos llamarlo o confesarlo como Jesús es el Señor.

El título de Señor, está asociado inicialmente a títulos de la nobleza y realeza.

Se le da desde la antigüedad a alguien que es dueño de algo; que tiene dominio y propiedad en ello.

Actualmente se utiliza como cortesía, pero asociado a alguien de respeto, mayores de edad.

Por ejemplo el Señor de la casa al hombre o a quien es el dueño de la casa. O a las personas casadas Por ej. Sr. y Sra. Pizarro.

Además se asocian a un cargo: Sr. Juez, Sr. Ministro, Sr. Diputado, Sr. Presidente, etc.

A las personas que no les damos el respeto debido, aunque sean mayores no les damos este título de Señor.

Por Ej: A un bolito o alcohólico del barrio, no le decimos Sr. Francisco, sino le decimos "chico" o lo llamamos por un apodo, "botellita", etc. Porque para la sociedad, para el barrio no son dignos de nuestro respeto, por el contrario nos apartamos de ellos.

Pero en la vida espiritual, el título de Señor tiene un gran significado.

A quienes se les dio este título en la Biblia?

1.- Abraham
Veamos como cuando el Dios le anuncia a Abraham, que su mujer Sara iba a tener un hijo:

Gén 18:12 Se rió, pues, Sara entre sí, diciendo: ¿Después que he envejecido tendré deleite, siendo también mi señor ya viejo?

Aquí la palabra utilizada es del hebreo Adón: Gobernar, Amo, dueño

Sara, sabía lo que era estar sujeta a su marido, reconocía en él la autoridad en su casa.

2.- José, hijo de Jacob, hijo de Isacc, hijo de Abraham
Vamos a revisar en la Biblia, cuando el faraón le dio a José, el segundo lugar al mando en Egipto.

Gén 41:40 Tú estarás sobre mi casa, y por tu palabra se gobernará todo mi pueblo; solamente en el trono seré yo mayor que tú.

Gén 42:6 Y José era el señor de la tierra, quien le vendía a todo el pueblo de la tierra; y llegaron los hermanos de José, y se inclinaron a él rostro a tierra.

Este cargo de señor, se relaciona como gobernador de Egipto, un gran título que le confiere poder a José.

Aquí la palabra señor viene del hebreo Shalit, que quiere decir gobernador, poderoso, príncipe, señor.

En este caso señor está asociado a dominio, poder territorial, control.

3.- A Jehová
3.1- Lo dijo Moisés
Deu 10:17 Porque Jehová vuestro Dios es Dios de dioses y Señor de señores, Dios grande, poderoso y temible, que no hace acepción de personas, ni toma cohecho;

3.2- Lo dijo el Rey David
El rey David, se refería a Dios, como Señor Jehová (en mayúsculas)

Sal 71:5 Porque tú, oh Señor Jehová, eres mi esperanza, Seguridad mía desde mi juventud.

Esta palabra Señor en Hebreo es Adonai, para referirse al nombre propio de Dios.

3.3- Lo dijo el profeta Jeremías
Jeremías 32:17-19 ¡Oh Señor Jehová! he aquí que tú hiciste el cielo y la tierra con tu gran poder, y con tu brazo extendido, ni hay nada que sea difícil para ti;

Aquí la palabra empleada es también Adonai.

Aquí demuestra que tiene un Señorío y gran poder y que nada es difícil para Dios.

18 que haces misericordia a millares, y castigas la maldad de los padres en sus hijos después de ellos; Dios grande, poderoso, Jehová de los ejércitos es su nombre;

Como es Señor, tiene potestad de dar misericordia a quien El quiera y castigo a los que El quiera, porque es grande y poderoso. Aquí Jeremías dice que su nombre es Jehová de los Ejércitos.

19 grande en consejo, y magnífico en hechos; porque tus ojos están abiertos sobre todos los caminos de los hijos de los hombres, para dar a cada uno según sus caminos, y según el fruto de sus obras.

Como es Señor es consejero, y gran poder, porque es el dueño de todo, conoce su obra lo que ha creado, y así también nos dará a cada uno según lo que hagamos, según el fruto de sus obras.

4.- A Jesús
4.1 Lo dijo Pablo
Otro caso que vamos a leer es cuando la conversión de Saulo que se utiliza la palabra Señor.

Hechos 9:17 Fue entonces Ananías y entró en la casa, y poniendo sobre él las manos, dijo: Hermano Saulo, el Señor Jesús, que se te apareció en el camino por donde venías, me ha enviado para que recibas la vista y seas lleno del Espíritu Santo.

Aquí la palabra utilizada en Griego es Kúrios, que significa supremo en autoridad, soberano.

4.2 Lo dijo el Apóstol Juan
En Apocalipsis, el Apóstol Juan, inspirado por el Espíritu Santo también usa esta palabra.

Apocalipsis 22:20-21 El que da testimonio de estas cosas dice: Ciertamente vengo en breve. Amén; sí, ven, Señor Jesús.
21 La gracia de nuestro Señor Jesucristo sea con todos vosotros. Amén.

En ambos casos la palabra utilizada es del griego Kurios.

O sea que tenemos la palabra en hebreo Adón, Shalit, Adonai, y en griego kurios, que ambas se conocen en español como Señor, autoridad suprema, soberano.

Ahora vamos a conocer más el significado de Señor.
Nosotros conocemos una oración de aceptación de Jesús, que dice en una parte: Acepto a tu hijo Jesús como mi Señor, mi Salvador, etc.

Esto quiere decir que lo aceptamos como nuestro dueño, como nuestro amo, nuestro consejero, que nos sometemos a El.

Pero en la Biblia no todos reconocieron a Dios o a Jesús como “su” Señor.

Ejemplo del Rey Saúl
El Rey Saúl, que perdió el favor de Dios no tuvo a Dios como “su” Señor, veamos lo que le dijo a Samuel.

1Samuel 15:15 Y Saúl respondió: De Amalec los han traído; porque el pueblo perdonó lo mejor de las ovejas y de las vacas, para sacrificarlas a Jehová tu Dios, pero lo demás lo destruimos.

El Rey Saúl no tenía a Dios como “su” Dios. El le dice a Samuel “tu” Dios, no le dice “mi” o “nuestro” Dios.

Ejemplo del Rey David
El Rey David, si sabía el significado de la palabra Señor.

Salmos 16:1 Guárdame, oh Dios, porque en ti he confiado.
2 Oh alma mía, dijiste a Jehová: Tú eres mi Señor; No hay para mí bien fuera de ti.

Esto quiere decir mi dueño, mi amo, mi autoridad sobre toda mi vida. No hay nada bueno fuera de Dios.

Nosotros podemos decir, pero si nosotros ya aceptamos a Jesús como mi Señor. El es “mi” o “nuestro” Señor.

Pero si aún hacemos nuestra voluntad, Jesús no es nuestro dueño, nuestro amo, nuestra autoridad en nuestra vida, Jesús no es nuestro Señor.

Veamos algunas áreas donde Jesús es o no es nuestro Señor, nuestro amo.

1.- Tiempo
Es Dios el dueño de nuestro tiempo o no tenemos tiempo para Dios, solo los Domingos. O solo cuando oramos solo decimos gracias por todo en el nombre de Jesús. Amen? Cuantos días pasamos sin orar, porque nos da mucho sueño.

O solo tenemos un poco más de tiempo cuando tenemos problemas, enfermedades?

Cuanto tiempo le damos a Dios? No nos queda tiempo, estamos ocupados siempre? O siempre no sale algo que nos impide dedicarle un tiempo a Dios?

O solo le damos a Dios lo que nos sobra de nuestro tiempo.

Qué tiempo le damos a Dios, para leer, para meditar, en su palabra?

Qué tiempo le damos para compartir su palabra a otros?

2.- Consultar a Dios nuestras decisiones
Es Dios el dueño de nuestras decisiones. Las decisiones que tomamos las consultamos a Dios?

1Samuel 30:1-6 Cuando David y sus hombres vinieron a Siclag al tercer día, los de Amalec habían invadido el Neguev y a Siclag, y habían asolado a Siclag y le habían prendido fuego.
2 Y se habían llevado cautivas a las mujeres y a todos los que estaban allí, desde el menor hasta el mayor; pero a nadie habían dado muerte, sino se los habían llevado al seguir su camino.
3 Vino, pues, David con los suyos a la ciudad, y he aquí que estaba quemada, y sus mujeres y sus hijos e hijas habían sido llevados cautivos.
4 Entonces David y la gente que con él estaba alzaron su voz y lloraron, hasta que les faltaron las fuerzas para llorar.
5 Las dos mujeres de David, Ahinoam jezreelita y Abigail la que fue mujer de Nabal el de Carmel, también eran cautivas.
6 Y David se angustió mucho, porque el pueblo hablaba de apedrearlo, pues todo el pueblo estaba en amargura de alma, cada uno por sus hijos y por sus hijas; mas David se fortaleció en Jehová su Dios.

Aquí vemos que para David, aún pasando dificultados el estaba fortalecido en Jehová “su” Dios.

Veamos la situación que enfrentaba David:
- La ciudad quemada
- Su familia secuestrada
- El pueblo quería apedrearlo

Que hizo David?
El podía ir con su gran ejército, a seguirlos, pero que hizo?

Veamos que dice la Biblia:

1Samuel 30:8 Y David consultó a Jehová, diciendo: ¿Perseguiré a estos merodeadores? ¿Los podré alcanzar? Y él le dijo: Síguelos, porque ciertamente los alcanzarás, y de cierto librarás a los cautivos.

David consultó a Dios antes de actuar.

Nosotros en algunos casos actuamos como de forma automática, sin consultar con Dios que hacer.

Cuando no consultamos con Dios, no todas las cosas nos resultan bien.

Ej: Comprar un artículo sin consultar a Dios.

3. Ser obedientes a nuestro Señor, nuestro amo
3.1- Amarnos los unos a los otros
Jua 13:35 En esto conocerán todos que sois mis discípulos, si tuviereis amor los unos con los otros.

3.2- Sobre perdonar
Cuando Dios nos manda a perdonar a quien nos ha ofendido, lo hacemos o lo dejamos para más tarde?
Mat 6:14-15 Porque si perdonáis a los hombres sus ofensas, os perdonará también a vosotros vuestro Padre celestial;
15 mas si no perdonáis a los hombres sus ofensas, tampoco vuestro Padre os perdonará vuestras ofensas.

3.3- Sobre tener deudas
Si Dios nos manda a no tener deudas, porque tomamos al crédito o al fiado?
Proverbios 22:7 El rico se enseñorea de los pobres, Y el que toma prestado es siervo del que presta.

3.4- Sobre salir de fiador
Si Dios nos manda a no ser fiador de alguien. Porque lo hacemos?
Proverbios 6:1-3 Hijo mío, si salieres fiador por tu amigo, Si has empeñado tu palabra a un extraño,
2 Te has enlazado con las palabras de tu boca, Y has quedado preso en los dichos de tus labios.
3 Haz esto ahora, hijo mío, y líbrate, Ya que has caído en la mano de tu prójimo; Vé, humíllate, y asegúrate de tu amigo.

3.5- Sobre andar en pleitos
Cuando alguien nos quita o nos hace algo injusto, armamos pleito?
Mat 5:40-41 y al que quiera ponerte a pleito y quitarte la túnica, déjale también la capa;
41 y a cualquiera que te obligue a llevar carga por una milla, vé con él dos.

Es Jesús nuestro Señor?
Si Jesús es nuestro Señor de nuestras vidas no debe ser solo de palabras, sino en todo lo que ocurre en nuestras vidas.

No solo debe ser dueño en las cosas materiales, sino de nuestro tiempo, nuestras relaciones, nuestras familias, nuestras decisiones.

Si no le damos todo nuestro tiempo a Jesús, solo tenemos tiempo los domingos a veces, o algunos días nada más, o no lo consultamos para tomar decisiones, o no obedecemos lo que nos manda, aunque hayamos aceptado a Jesús como nuestro Señor, entonces no es cierto que consideremos a Jesús como nuestro Señor.

Veamos que dice la palabra:

Rom 10:9-10 que si confesares con tu boca que Jesús es el Señor, y creyeres en tu corazón que Dios le levantó de los muertos, serás salvo.
10 Porque con el corazón se cree para justicia, pero con la boca se confiesa para salvación.

Debemos de confesar y “mostrar” con nuestras obras que Jesús es nuestro Señor.

Flp 2:9-11 Por lo cual Dios también le exaltó hasta lo sumo, y le dio un nombre que es sobre todo nombre,
10 para que en el nombre de Jesús se doble toda rodilla de los que están en los cielos, y en la tierra, y debajo de la tierra;
11 y toda lengua confiese que Jesucristo es el Señor, para gloria de Dios Padre.

Debemos de doblar nuestras rodillas y confesar que Jesús es nuestro Señor.

Este título de nombre sobre todo nombre, indica que no hay otro nombre en el cual podemos ser salvos.

Hch 4:12 Y en ningún otro hay salvación; porque no hay otro nombre bajo el cielo, dado a los hombres, en que podamos ser salvos.

Y no solo es Señor, sino que dice la Biblia que es más que eso:

Apo 17:14 Pelearán contra el Cordero, y el Cordero los vencerá, porque él es Señor de señores y Rey de reyes; y los que están con él son llamados y elegidos y fieles.

El es el Kurios de los kurios, de los adon, de los shalit, el es Adonai.

Que jehová te bendiga y te guarde

Amen